VDL 32: El Cuarto Mono

El Cuarto Mono de J.D. Barker, publicado por la editorial Destino, es una de las últimas historias que me tuvo atrapado el pasado mes de agosto. Ahora, por fin, llega a la sección de novela negra de Va De Letras. Se trata de un adictivo thriller policíaco en el que la acción no cesa y que, además, ya cuenta con una segunda parte publicada recientemente por la misma editorial, La quinta víctima. ¿Es posible adentrarse en la mente de un asesino en serie solo a través de las páginas de una novela? Con El Cuarto Mono confirmo que sí.

El Cuarto Mono de J.D. Barker y Ediciones Destino

El thriller de Barker nos sumerge de lleno en medio de una investigación en las calles de Chicago. Un hombre parece haber sido atropellado por un autobús. La víctima llevaba una cajita blanca atada con un cordel negro y, dentro de ella, una oreja. Justo como las que años atrás enviaba a la familia de sus víctimas uno de los asesinos en serie más terroríficos de la ciudad: el Cuarto Mono. Ahora que el Cuarto Mono ha muerto el siguiente paso es desentrañar su identidad pero, sobre todo, descubrir dónde se encuentra su última víctima, esa que acaba de perder una oreja. En esta carrera contrarreloj estarán implicados el detective Sam Porter, su compañero Nash y el joven Paul Watson.

El Cuarto Mono reúne todos los ingredientes para que uno se adentre en una lectura vertiginosa. A través de una narración frenética, repleta de diálogos certeros y muy cinematográficos, J.D. Barker nos va desgranando el día a día en esta búsqueda de la última víctima del Cuarto Mono pero, también, de la identidad de este asesino cuyo modus operandi resulta muy particular. Siempre actúa igual: secuestra a una de sus víctimas y, poco después, va enviando una serie de cajas a sus familias. La primera de ellas, con una oreja; la segunda, con los dos ojos; y la tercera, con la lengua, hasta el fatal desenlace que es la aparición del cuerpo sin vida en algún lugar. Gracias a las conversaciones y reflexiones de Porter con el resto de su equipo, el lector también es testigo de los avances y los estancamientos en la investigación. Por ello, la tensión e intriga van en aumento en cada capítulo.

«Porter se vio allí, con los ojos clavados en el cadáver, aquel bulto bajo el sudario negro de plástico. Se había quedado sin palabras. Nash pidió que retrocediesen y le dejaran un poco de espacio a Porter, que le concediesen un momento a solas con la víctima. Se apartaron con paso lento y se situaron detrás de la cinta amarilla que delimitaba la escena, hablando en voz baja mientras observaban. Para Porter, eran invisibles. Tan sólo veía la bolsa negra del cadáver y el pequeño paquete que descansaba junto a ella».

No obstante, uno de los elementos más interesantes de la novela es la estructura alterna que presenta. Y es que la investigación de Porter y el resto de su equipo se intercala con un diario, en primera persona, del propio asesino, El Cuarto Mono. De esta manera, la trama policíaca gana aún en profundidad gracias a que el lector puede conocer cómo fue la infancia de este ‘serial killer’. Barker logra profundizar en el pasado de El Cuarto Mono gracias al retrato que construye a través de los hechos que relata en su diario: conoceremos a sus padres y la manera en que vivían su ‘particular’ día a día y viviremos con ellos un sorpresivo giro de los acontecimientos.

En definitiva, El Cuarto Mono combina el incesante ritmo del thriller con los realistas giros de una investigación policíaca. No obstante, J.D. Barker no se limita a mostrarnos una trama criminal sin más. En su original estructura hay espacio para la profundidad en la construcción de sus personajes, desde el difícil trauma de Sam que se intuye ya en el primer capítulo hasta el revelador relato en primera persona del propio Cuarto Mono. Un thriller que lo tiene todo, ¡y también segunda parte!  😎

A destacar: Un thriller sin respiro que gana en profundidad gracias al detallado diario en primera persona del asesino que vertebra la trama.

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