El Recomendado del Mes (Diciembre 2014): «Los millones de Brewster»
Inauguramos otra nueva sección en Vadeletras: El Recomendado del Mes. A principios de cada mes seleccionaré una lectura destacada, aquel libro que me haya cautivado, con el que mejor me lo haya pasado, el que me haya llamado la atención por su calidad, por lo ingenioso de su trama, por la profundidad de sus personajes, por su cuidada edición…en definitiva, aquel libro que haya dejado una huella especial en mí. Durante todo el mes en curso, esta reseña estará destacada en el blog con la portada del libro. ¿Queréis descubrir cuál es el libro recomendado de este mes de diciembre?
Una de las cosas que más agradezco de un libro es que sea capaz de sumergirte en una historia de tal forma que se te olvide, durante el tiempo que estás leyendo, todo lo demás. Esto es lo que me ha pasado con uno de los relatos que la editorial Alba ha publicado en su colección Rara Avis. Se trata de la novela Los millones de Brewster de George Barr McCutcheon. Me apetecía leer una historia divertida, agradable, que me hiciera desconectar…y lo consiguió. Los millones de Brewster se ha convertido en una de mis lecturas favoritas del año, por el buen rato que me ha hecho pasar y lo enganchado que me tuvo esta desopilante trama de enredo en torno a una herencia y las consecuencias que trae consigo. Pero, vayamos por partes…
La novela de McCutcheon se centra en una herencia, como ya he dicho, que es la que recibe el joven Monty Brewster en su 25º cumpleaños: su abuelo ha fallecido y le ha dejado un millón de dólares. Pero, al poco tiempo, Monty recibirá otra herencia inesperada, la de un tío suyo del que apenas ha oído hablar y que le nombra heredero, nada más y nada menos que de casi siete millones de dólares. Aunque este regalo viene algo envenenado…Y es que, para poder heredar esta cuantiosa suma de dinero, Monty deberá gastarse en el plazo de un año hasta el último centavo de la primera herencia recibida de su abuelo. ¿Parece fácil, no? Un millón de dólares y un año para gastarlo. Sí, pero no estamos en España y aquí sí hay letra pequeña: nada de cuentas en Suiza. Su tío exige a Monty como condición que, para gastarse la primera herencia, no podrá hacer donaciones benéficas, ni apuestas ni especulaciones y no podrá decírselo a nadie.
A partir de aquí Monty comenzará una carrera contrarreloj para gastarse todo lo que su abuelo le dejó tras fallecer y descubrirá que lo de dilapidar una fortuna para heredar otra entraña sus dificultades.
“Brewster se fue dando cuenta poco a poco de una cosa. Se había pasado al vida preguntándose de dónde iba a sacar el dinero para pagar sus facturas, pero jamás había pensado que gastar dinero pudiese ser tan difícil como ganarlo”.
Y así capítulo a capítulo, se suceden todas y cada una de las estratagemas que Monty utilizará para gastar la fortuna de su abuelo: alquilará uno de los pisos más caros de Nueva York y celebrará una fastuosa cena ante el estupor de sus amigos y asesores que piensan que está perdiendo la cabeza con tanto dispendio incontrolado. Y como no puede contar a nadie el porqué de este sprint consumista, todos le tomaran por un loco caprichoso…incluida su enamorada Barbara.
“Como de costumbre cuando estaba en apuros, recurrió a Margaret Gray, siempre dispuesta a darle consejo y ánimos. Como la joven iba a asistir a la siguiente cena, no le costaría nada a Monty sacar a relucir el asunto: bastaría con mencionar a los otros invitados.
-Y Barbara Drew – dijo, después de nombrar a todos los demás. Estaban solos en la biblioteca, y Margaret iba imaginando los detalles de la cena a medida que él se los describía.
– ¿No la invitaste ya a tu primera cena? – preguntó al instante.
Monty se fingió algo avergonzado.
-Sí.
-Debe de ser muy guapa.
No había el menor resentimiento en Peggy.
– Es guapa. De hecho, es una de las mejores – respondió él, allanando el camino para introducir el asunto que le interesaba. […] Peggy no se explicaba por qué de pronto se había ensombrecido el ambiente”.
A lo largo de la novela Monty se hará experto en contabilizar gastos y en elegir todo aquello que le facilite desembarazarse de la mayor cantidad de centavos posibles. Todo para conseguir la ruina en el plazo de un año.
El autor de esta trama de derroche, George Barr McCutcheon nació en Indiana en 1866 y murió en Manhattan en 1928. En 1901 publicó Graustark: The story of a love behind a throne, una novela de aventuras s ambientada en un imaginario reino europeo que cosechó grandes éxitos y se convirtió en saga. La publicación de Los millones de Brewster en 1902 vino precedida de una apuesta. Su editor le propuso igualar el éxito de Graustark siempre que la publicara bajo pseudónimo.Y con el nombre de Richard Graves, el autor ganó la apuesta vendiendo 150.000 ejemplares de la historia de Brewster en apenas tres meses. Un éxito que ha traspasado el papel ya que son nueve las veces que la novela ha sido llevada al cine, tres de ellas en la India.
A destacar: Amor, aventuras y muchas risas han hecho que esta historia me haya entretenido los dos o tres días que me duró. La devoré y cada noche siempre decía “un capítulo más y a la cama”. Y es que su entrañable personaje protagonista y el cúmulo de dificultades por las que pasará para hacerse rico resultan desternillantes. Todo un antídoto de diversión para alegrarse el día.
Autor: George Barr McCutcheon
Editorial: Alba
Páginas: 299
Precio: 18 €
Valoración:
Comentarios recientes